Tomé mi corazón
Y lo puse en mi mano
Lo miré como quien mira
Granos de arena o una hoja.
Lo miré pávido y absorto
Como quien sabe estar muerto;
Con el alma sólo conmovida
del sueño y poco de la vida.
Fernando Pessoa, Cancionero
miércoles, abril 11, 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario